Reparación

Estáfame, Apple, que me gusta.

Ya, ya sé que llegarán comentarios haters de «esto te pasa por pagarle a Apple» y de «un Wikko de 100€ te da el mismo servicio». Os los podéis ahorrar, de verdad. O no, servíos.

La cosa es que hoy me he dado cuenta de que el cristalito que cubre la cámara de mi iPhone 6s está roto mientras cambiaba la funda por otra nueva. Dos grietas justo a los lados de la lente. Sí, ese cristal supuestamente de zafiro que no se quiebra ni aunque le pase por encima una manada de rinocerontes con diamantes en las pezuñas bailando claqué. Ese. Por suerte, no afecta a la cámara -de momento- porque no pasan por delante de la lente. Son tan finitas que apenas se ven en esta foto que me ha costado la vida enfocar con un iPhone 4s de un compañero:

Cracks

Y lo típico: cacharro con funda puesta desde el día 1, cuidado al máximo (los que me conocéis sabéis que cuido mis mierdas como si me fuera la vida en ello), ningún golpe, etc. Eso que decimos todos cuando llevamos algo roto al servicio técnico («¡YO NO HE SIDO!»), pero de verdad. Sé de qué va esta mierda, me traen cinco o seis teléfonos reventados al día diciéndome que se han roto solos, y nunca les creo -obviamente-.

El caso es que con cierta tranquilidad, ya que contraté el Apple Care el día de la compra (el «seguro ampliado»), he abierto chat con el servicio técnico de Apple. Y lo que ha ocurrido es esto:

Apple (cegado)

¿TL;DR? Resumo: Apple considera que esto no entra en garantía (que puedo llegar a entenderlo), pero quiere cobrarme 351,10€ por un cristalito del tamaño de media uña de meñique. Oquei, Apple.

Jacob, el técnico que me ha atendido en el chat, ha concertado una cita telefónica con un asesor a eso de las 14:00. Os mantendré informados. Mi cabreo y yo nos vamos a comer.

UPDATE (14:30h): 

Una llamada muy puntual desde Irlanda mientras estaba comiendo. Un señor muy amable del SAT de Apple me confirma lo que Jacob me dijo por chat. Le digo que puedo entender que no se crean que no le he dado ningún golpe a mi iPhone y que lo que realmente me indigna es el pastizal que me quieren cobrar por la reparación. Debo caerle bien al tipo (o es el procedimiento, no sé) porque me dice que PUEDE SER que sea un defecto de fabricación fiándose de mi palabra, PERO que eso lo tiene que valorar ya un técnico en persona y PUEDE que me dé la razón o no. Me da varias opciones para mandar el iPhone a reparar, aconsejándome que no haga uso de mi derecho al teléfono de sustitución por tener contratado el AppleCare porque si finalmente opinan que ha sido negligencia mía, me cobran el pastizal y me retienen parte de una fianza que tengo que depositar cuando me lo den. De locos.

ApolPLS

Tengo la cita para el martes por la tarde. Hasta entonces, #PrayForLobo’sFirstWorldProblems.

Update 2: Final feliz

Tuve que aplazar la cita en el Genius Bar porque tenía que grabar podcast. Al final he ido hoy, viernes, y llevaba un discurso preparadísimo, todas las ganas de pelear por mis derechos, y todas las tácticas posibles para que el Genius empatizara conmigo. En lugar de todo eso, lo que ha ocurrido es:

-A ver, cuéntame.
-Pues mira, el cristal de la lente está roto por dos sitios y el iPhone no tiene ningún golpe.
-Hm… cuando hay golpe, se nota. Es la tercera vez en mis años currando en Apple que veo algo así. Desgraciadamente, la pieza no se puede cambiar, así que no queda más remedio que cambiar el teléfono entero.
-O_o
-…
-O… oquei.
-Vale, pues desbloquéamelo que voy p’adentro a comprobar unas cositas y te saco el nuevo.
-…
-Toma, ponle la SIM, compruébalo, fírmame aquí y ya está.
-Snif… gracias.

EN FIN. Apple, todo correcto. Todo correcto excepto que en un primer momento el nivel de desconfianza del técnico de atención al cliente hacia el cliente fue total y absoluta. Aunque sea mentira, dadles a los clientes el beneficio de la duda y suavizad el tema antes de dar por hecho que la respuesta a todo es «NO, PAGA».

Arf.